miércoles, 27 de enero de 2016

Las prioridades al organizar nuestro tiempo

“El tiempo es oro” reza un dicho popular, que bien define que la organización inteligente de nuestras actividades nos dará un resultado satisfactorio. Cuando estemos desorientados sin saber qué es lo primero que debemos hacer porque la agenda se encuentra repleta de pendientes, elijamos por prioridades.
Elegir por prioridades significa encontrar nuestros objetivos. Si necesitamos trabajo, lógicamente nuestra prioridad será tratar de encontrarlo. Si nuestra meta es ganar un examen en la universidad, lo fundamental será conseguir el material indicado y ponernos a estudiar. De esta manera, lo primero es organizar una lista con los principales objetivos de nuestra vida en ese momento y así ir numerando lo que necesitamos para lograrlo, a continuación varios consejos para organizarnos.



Elegir prioridades para satisfacer necesidades
En este caso, no solamente entran nuestras necesidades, sino las de quienes dependen de nosotros. Engloba las necesidades de nuestros seres queridos y amigos: satisfacer la necesidad de alimento de nuestros hijos, un techo, estudios, etc. Así también, las necesidades por ejemplo de nuestro cuerpo, como es la salud, si estamos enfermos podemos tener un listado enorme de cosas que debemos hacer o terminar pero estaremos impedidos para lograrlo porque no tenderemos fuerzas para llevarlo a cabo. Dedicar tiempo a cuidar la salud es una inversión para toda la vida.

Elegir prioridades para lograr metas profesionales
            En esta área entran el trabajo y los estudios, nuestras prioridades deben estar bien organizadas y ordenadas para ir poco a poco cumpliéndolas. El apurarnos por cumplir nuestros objetivos puede llevarnos a perder demasiada energía y tiempo en actividades que no nos ayudan, o algunas veces hasta olvidar la ética y la moral. Es mejor serenarse e ir conforme la realidad de nuestras posibilidades pero siempre esforzándonos y dando lo mejor exigiéndonos en nuestras capacidades. Estudiar, educarse, buscar opciones, unificar esfuerzos y solidarizarse nos llevará también a enriquecernos personalmente, también a cosechar buenas amistades y alcanzar nuestras metas laborales y profesionales.  


Elegir prioridades en nuestras relaciones
            Tener una familia y buenos amigos, nos hará más felices. En esta parte es necesario elegir nuestras amistades basándonos en el tipo o estilo de vida que deseamos llevar. Algunas veces es necesario dejar amistades que solamente perjudican nuestra paz interior o bien nos hacen tomar decisiones equivocadas. La amistad se basa en el respeto muto, la sinceridad y la buena comunicación. La familia, como bien sabemos, es la base de la sociedad y ningún esfuerzo es vano, si dedicamos tiempo a tener relaciones familiares llenas de amor y comprensión.

Las prioridades en nuestra vida espiritual
            Esta parte, debería ser la primera prioridad a tomar en cuenta. Si nuestro interior está bien, todo estará bien en el exterior. La vida espiritual es la que nos hará verdaderamente felices, brindemos tiempo a actividades para relajarnos y enriquecernos espiritualmente. Dedicarnos tiempo para estar con nosotros mismos y meditar qué es lo que más nos llena y nos hace felices, hará que rápidamente nos organicemos y aprendamos a elegir prioridades. Conocernos y agradarnos a nosotros mismos es muy importante para ser verdaderamente felices.


En conclusión, priorizar y dividir nuestro tiempo dedicándolo a enriquecernos en todos los sentidos de nuestra vida; material, espiritual, profesional y social, es la clave del éxito.